Evangelio 29 Diciembre|Será llamado Nazareno
Evangelio según San Mateo 2,13-15.19-23.
José se levantó, tomó de noche al niño y a su madre, y se fue a Egipto.
Allí permaneció hasta la muerte de Herodes, para que se cumpliera lo que el Señor había anunciado por medio del Profeta: Desde Egipto llamé a mi hijo.
Cuando murió Herodes, el Angel del Señor se apareció en sueños a José, que estaba en Egipto,
y le dijo: «Levántate, toma al niño y a su madre, y regresa a la tierra de Israel, porque han muerto los que atentaban contra la vida del niño».
José se levantó, tomó al niño y a su madre, y entró en la tierra de Israel.
Pero al saber que Arquelao reinaba en Judea, en lugar de su padre Herodes, tuvo miedo de ir allí y, advertido en sueños, se retiró a la región de Galilea,
donde se estableció en una ciudad llamada Nazaret. Así se cumplió lo que había sido anunciado por los profetas: Será llamado Nazareno.
RESUMEN EVANGELIO, DOMINGO 29, FIESTA DE LA SAGRADA FAMILIA, MATEO 2, 13-15.19-23
Familias del siglo XXI, ¿qué podemos aprender de la familia de Nazaret, compuesta por Jesús, José y María?
1. Hoy todas las lecturas de la santa misa retratan lo que debe ser una familia a los ojos de Dios:
a) Los padres amen, cuiden y recen con sus hijos.
b) Los hijos honren, respeten, obedezcan a sus papás, cuídenlos en su vejez.
c) Los esposos ámense, ténganse paciencia, sean compasivos y afables, recen. Y en los momentos de dificultad, estén juntos pidiendo a Dios las gracias necesarias.
2. Veamos ahora a la familia de Nazaret, que es para nosotros MODELO:
a) Familia probada por Dios: pobreza, destierro, inseguridad.
b) Familia apoyada, afincada y unida en Dios y en la oración, en el amor mutuo y en el sacrificio vivido con serenidad y paciencia.
3. Veamos también nuestras familias:
a) Sin duda que hay familias ejemplares, ¡qué maravilla! Desde aquí nuestro agradecimiento sincero. Nos están gritando que se puede vivir una vida de familia en el amor y el respeto, en la piedad y en el sacrificio.
b) Pero también conocemos familias que están sufriendo la separación, la división, el divorcio, familias con hijos problemáticos y en riesgo. ¿Qué aconsejarles? Contemplar a la familia de Nazaret y seguir su ejemplo de oración, amor y respeto.
Recemos hoy especialmente por estas familias y por todas las familias, para que el próximo año 2020 sea un año lleno de bendiciones, que miren hacia arriba, y le pidan a Dios todas las gracias que necesitan. Ah, si todas las familias fuesen reflejo de la familia de Nazaret. Este mundo sería como una antesala del cielo, ¿no creen? Cuenten con mi oración, familias que me escuchan. Obispos, sacerdotes, ¡apoyen y estén cercanos a esas familias más heridas y necesitadas, bendíganlas! Les mando a cada uno de ustedes en particular la bendición de Dios, P. Antonio Rivero, L.C.