DOMINGO 31 DE ENERO
RESUMEN DEL EVANGELIO, DOMINGO 31 DE ENERO
SAN JUAN BOSCO
Marcos 1, 21-28: En aquel tiempo, Jesús y sus discípulos llegaron a Cafarnaúm. Al llegar el sábado entró en la sinagoga y se puso a enseñar. Y quedaban asombrados de su doctrina, porque les enseñaba como quien tiene autoridad, y no como los escribas. Había precisamente en su sinagoga un hombre poseído por un espíritu inmundo, que se puso a gritar: «¿Qué tenemos nosotros contigo, Jesús de Nazaret? ¿Has venido a destruirnos? Sé quién eres tú: el Santo de Dios». Jesús, entonces, le conminó diciendo: «Cállate y sal de él». Y agitándole violentamente el espíritu inmundo, dio un fuerte grito y salió de él. Todos quedaron pasmados de tal manera que se preguntaban unos a otros: «¿Qué es esto? ¡Una doctrina nueva, expuesta con autoridad! Manda hasta a los espíritus inmundos y le obedecen». Bien pronto su fama se extendió por todas partes, en toda la región de Galilea.
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MI COMENTARIO
¿Cuántos demonios tiene nuestro mundo, nuestra Iglesia, nuestra alma? Hoy Cristo quiere sacarnos esos demonios de nuestro cuerpo, de nuestra alma, de nuestra psicología.
1. Demonios de nuestro mundo: están ahí revoloteando y cambiando nuestra mentalidad, nuestra ideología, nuestros valores éticos, morales y religiosos. Quieren inocular el Covid del materialismo y relativismo, de la dictadura del aborto y eutanasia, la ideología del género, el placer sin reglas, el matrimonio a prueba. Nos hacen creer que todo se puede y es lícito, que no debe haber prohibiciones. Médicos sin escrúpulos. Gobernantes tiranos y desalmados. Políticos corruptos. Jueces comprados. Maestros abusadores. Nuestro mundo necesita escuchar una vez más la voz tronante de Cristo: “Cállate y sal de él”. ¿Escuchará nuestro mundo la Palabra de Cristo o seguirá en su sordera y malicia?
2. Demonios en algunos hombres de nuestra Iglesia: los ha citado varias veces el papa Francisco. Mundanismo, afán de protagonismo y autorreferencia, ambiciones, escándalos y abusos, enjuagues, miedos para decir la verdad, aunque cueste y se prefiere el silencio ante gobiernos que pisotean la ley de Dios, se quiere quedar bien y lo políticamente correcto; protestas, crítica, rebeliones al Papa. Nuestra Iglesia hoy necesita escuchar de nuevo: “Cállate y sal de esa diócesis, de esa parroquia, de esos hombres de Iglesia”.
3. Demonios en algunos de los hombres: el demonio de la envidia, de la soberbia, de la mentira, de la tristeza, de la desesperanza, del egoísmo, de la gula, de la ira, de la falta de esfuerzo, de la pereza y de la impureza. ¡Cuánta indecencia y asquerosidad en las películas! Muchos ya no rezan ni van a misa. Muchos ya no colaboran con los necesitados. Muchos prefieren hacer su vida al margen de Dios y de la ley natural. Van por libre. Estas personas hoy necesitan escuchar de Cristo: “Cállate y sal de esa alma y de ese cuerpo”.
Cristo tiene autoridad para decir y hacer esto. Él es el auténtico exorcista y profeta, mandado por el Padre Dios. ¿Le dejaremos hacer esta obra de sanación? ¿O preferimos que los demonios sigan revoloteando por nuestro mundo, por nuestra Iglesia y por nuestro alrededor? Señor, sácame mis demonios- digamos hoy con fe y confianza. ¡Feliz domingo! Les mando a cada uno la bendición de Dios, P. Antonio Rivero, L.C.
