Evangelio según San Lucas 2,1-14.
Este primer censo tuvo lugar cuando Quirino gobernaba la Siria.
Y cada uno iba a inscribirse a su ciudad de origen.
José, que pertenecía a la familia de David, salió de Nazaret, ciudad de Galilea, y se dirigió a Belén de Judea, la ciudad de David,
para inscribirse con María, su esposa, que estaba embarazada.
Mientras se encontraban en Belén, le llegó el tiempo de ser madre;
y María dio a luz a su Hijo primogénito, lo envolvió en pañales y lo acostó en un pesebre, porque no había lugar para ellos en el albergue.
En esa región acampaban unos pastores, que vigilaban por turno sus rebaños durante la noche.
De pronto, se les apareció el Angel del Señor y la gloria del Señor los envolvió con su luz. Ellos sintieron un gran temor,
pero el Angel les dijo: «No teman, porque les traigo una buena noticia, una gran alegría para todo el pueblo:
Hoy, en la ciudad de David, les ha nacido un Salvador, que es el Mesías, el Señor.
Y esto les servirá de señal: encontrarán a un niño recién nacido envuelto en pañales y acostado en un pesebre».
Y junto con el Angel, apareció de pronto una multitud del ejército celestial, que alababa a Dios, diciendo:
«¡Gloria a Dios en las alturas, y en la tierra, paz a los hombres amados por él!».
RESUMEN EVANGELIO MARTES 24 DE DICIEMBRE, VÍSPERA DE NAVIDAD, LUCAS 1, 67-79
Elevo mi gratitud a Dios hoy por estas dos gracias, y les pido que se unan a mi acción de gracias:
1. Hace 63 recibí la mayor gracia que un hombre o mujer puede recibir: fui bautizado en mi pueblo, en la mañana de un 24 de diciembre de 1956, a los 7 días de nacer. Me contó mi madre que ese día nevaba mucho y hacía mucho frío, propio de la tierra de Ávila.
2. Hace 33 años recibí la gracia inmerecida del orden sacerdotal: fui ordenado sacerdote en Roma, en la mañana del 24 de diciembre de 1986, con otros 8 compañeros legionarios de Cristo. 33 años de fidelidad de Dios. Ante el don del sacerdocio no cabe otra postura que AGRADECER, CUIDAR Y TRANSMITIR LA ALEGRÍA DE SER OTRO CRISTO para llevar a todos la salvación de Dios que ese Niño Dios vino a traer el día de Navidad, como regalo para TODOS.
Y ahora sí vamos al evangelio de hoy. Se trata del himno de gratitud de Zacarías por haberle concedido Dios a él y a su esposa Isabel la gracia de ser padres, de tener un hijo, Juan. ¿Qué hay detrás de este cántico:
1. Que Dios ha sido fiel a sus promesas: todo lo anunciado por los profetas se ha cumplido con la llegada de Jesús. ¡Gracias, Dios mío!
2. Que Dios viene a liberarnos de nuestros enemigos, temor. ¡Gracias, Dios mío!
3. Que aprendamos de Zacarías a entonar con frecuencia cantos de alabanza a Dios, porque continuamente estamos recibiendo sus dones, y a vivir nuestros días en su presencia, llenos de confianza y fidelidad también de nuestra parte.
¡Feliz Navidad a todos ustedes, amigos míos! Les mando a cada uno en particular la bendición de Dios, P. Antonio Rivero, L.C.