RESUMEN EVANGELIO MARTES 14 DE ENERO, MARCOS 1, 21-28: legó Jesús a Cafarnaum y el sábado entró en la sinagoga y se puso a enseñar. Y quedaban asombrados de su doctrina, porque les enseñaba como quien tiene autoridad, y no como los escribas. Había precisamente en su sinagoga un hombre poseído por un espíritu inmundo, que se puso a gritar: «¿Qué tenemos nosotros contigo, Jesús de Nazaret? ¿Has venido a destruirnos? Sé quién eres tú: el Santo de Dios». Jesús, entonces, le conminó diciendo: «Cállate y sal de él». Y agitándole violentamente el espíritu inmundo, dio un fuerte grito y salió de él. Todos quedaron pasmados de tal manera que se preguntaban unos a otros: «¿Qué es esto? ¡Una doctrina nueva, expuesta con autoridad! Manda hasta a los espíritus inmundos y le obedecen». Bien pronto su fama se extendió por todas partes, en toda la región de Galilea.
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MI COMENTARIO
¿Qué espíritu inmundo está rondándome y está rondando nuestro mundo y nuestra Iglesia?
1. ¡Qué gracia tuvo ese hombre del evangelio de hoy, poseído por un espíritu inmundo y maligno que lo tenía esclavizado y torturado! No sabemos cómo se le metió ese espíritu inmundo, pero seguro que ese hombre abrió las puertas de su inmaginación y afectos a ese espíritu inmundo, y éste entró en su cuerpo. ¡Qué bueno que se encontró con Cristo y Cristo expulsó ese espíritu inmundo de ese pobre hombre! Quedó liberado y sanado. Jesús médico y salvador. Para eso ha venido.
2. ¿Acaso en varios rincones de nuestro mundo, de nuestra Iglesia, de nuestras familias, de nuestros corazones…no rondan ya algunos espíritus inmundos y malignos?
a) El espíritu inmundo que provoca las muertes de inocentes, en el aborto, con la eutanasia.
b) El espíritu inmundo que provoca divisiones, divorcios y peleas en tantas familias.
c) El espíritu inmundo que tiene acogotados a tantos jóvenes en vicios, drogas, prostitución, impureza, bebidas alcohólicas.
d) El espíritu inmundo que ha tenido el descaro de provocar tantos casos de pedofilia y pederastia en la Iglesia y en hombres de Iglesia que deberían ser santos. Y tanta confusión doctrinal en algunos clérigos, obispos y cardenales. Basta seguir las noticias de periódicos, noticieros.
e) El espíritu inmundo de la ira, de la ambición, corrupción en tantos gobernantes.
3. ¿Para qué seguir? Hoy metámonos en nuestro corazón y veamos si no hay por ahí algún espíritu inmundo y maligno que me ronda y quiere destruirme? ¿La ira, la envidia, la impureza, la pereza, la indiferencia religiosa, el egoísmo?
Hoy es día para acercarnos a Cristo Médico y pedirle nos sane, sane nuestro mundo, nuestra Iglesia, nuestras familias, nuestros jóvenes, nuestros sacerdotes, nuestros gobernantes. Les mando a cada uno de ustedes la bendición de Dios, P. Antonio Rivero, L.C.
