Share

Evangélio 10 Marzo|Pedid y se os dará,buscad y hallareis

RESUMEN DEL EVANGELIO, JUEVES 10 DE MARZO
Mateo 7, 7-12: En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: «Pedid y se os dará; buscad y hallaréis; llamad y se os abrirá. Porque todo el que pide recibe; el que busca, halla; y al que llama, se le abrirá. ¿O hay acaso alguno entre vosotros que al hijo que le pide pan le dé una piedra; o si le pide un pez, le dé una culebra? Si, pues, vosotros, siendo malos, sabéis dar cosas buenas a vuestros hijos, ¡cuánto más vuestro Padre que está en los cielos dará cosas buenas a los que se las pidan! Por tanto, todo cuanto queráis que os hagan los hombres, hacédselo también vosotros a ellos; porque ésta es la Ley y los Profetas».
_______________________________
MI COMENTARIO

El poder de la oración. Cuaresma tiempo para revisar nuestra oración.

1. “Pidan y se les dará”: ¿Qué solemos pedir a Dios? ¿Sólo cosas materiales? ¿O también cosas espirituales? ¿Sólo cosas para nosotros? ¿O también cosas para el mundo -como hizo la reina Ester en la primera lectura de hoy-, la Iglesia, las familias, las vocaciones, los necesitados, la paz…? Revisemos el contenido de nuestra oración. Y el modo de pedirlo. Tenemos que pedirlo con fe, humildad, confianza, perseverancia, desprendimiento, y siempre diciendo a Dios: “Dame esto, si es tu voluntad, Señor”. Basta repasar las curaciones del evangelio. Enfermos fueron curados porque pidieron con fe y humildad.
2. “Busquen y encontrarán”: ¿A quién buscamos: embaucadores, estafadores, demagogos? ¿A dónde solemos buscar: en la caja de Pandora, para hartarnos de cosas que alegran nuestra sensibilidad? Si buscamos en los Sagrarios, donde está Cristo presente, encontraremos las gracias que necesitamos para nuestra salud espiritual y para nuestro crecimiento en las virtudes. Pero si buscamos sólo en los mercados del mundo, ya sabemos lo que encontraremos: cosas y más cosas, que apegan nuestro corazón y lo atan a este mundo, y nos impide volar. Busquemos también en la Palabra de Dios; ahí encontraremos la luz para el camino, el consuelo para el dolor, el consejo para nuestro discernimiento.
3. “Toquen y se les abrirá”: ¿A qué puerta solemos tocar cada día? ¿A la puerta de nuestra pereza, orgullo, vanidad, fama, dinero…? ¿O tocamos a la puerta del necesitado, donde Dios se esconde? ¿Tocamos a la puerta de la Biblia donde nos sale nuestro Señor que nos trae la salvación y la paz y lo que necesitamos para nuestra vida personal, familiar, profesional y apostólica?
4. Cristo nos da ejemplo de oración: pidió ser librado de la muerte en Getsemaní. ¿Fue escuchado por su Padre? A veces es misteriosa la manera cómo Dios escucha nuestra oración. Y tantos santos, igualmente. Dios les concedió lo que necesitaban para su propia santificación y purificación. Estemos seguros con el salmo, y decir confiadamente: “cuando te invoqué, me escuchaste, Señor”. Pidamos por la paz en el mundo, por la santidad de los sacerdotes, para la unidad de las familias, por los pobres y necesitados. Y Dios nos escuchará.

Recemos hoy, jueves sacerdotal, por todos los sacerdotes del mundo, para que Dios les conceda lo que más necesiten en este momento. Les mando a cada uno la bendición de Dios, P. Antonio Rivero, L.C.