RESUMEN EVANGELIO DEL MARTES 14 DE JULIO
SAN CAMILO DE LELIS, SACERDOTE ITALIANO FUNDADOR DE LA CONGREGACIÓN DE LOS SERVIDORES DE LOS ENFERMOS EN EL SIGLO 16, CONGREGACIÓN DEDICADA AL CUIDADO ESPIRITUAL Y CORPORAL DE LOS ENFERMOS. ES PATRONO DE LOS ENFERMOS DE HOSPITALES. ¡FELICIDADES A LOS CAMILIANOS!
Evangelio de hoy: Mateo 11, 20-24: En aquel tiempo, Jesús se puso a maldecir a las ciudades en las que se habían realizado la mayoría de sus milagros, porque no se habían convertido: «¡Ay de ti, Corozaín! ¡Ay de ti, Betsaida! Porque si en Tiro y en Sidón se hubieran hecho los milagros que se han hecho en vosotras, tiempo ha que en sayal y ceniza se habrían convertido. Por eso os digo que el día del Juicio habrá menos rigor para Tiro y Sidón que para vosotras. Y tú, Cafarnaúm, ¿hasta el cielo te vas a encumbrar? ¡Hasta el Hades te hundirás! Porque si en Sodoma se hubieran hecho los milagros que se han hecho en ti, aún subsistiría el día de hoy. Por eso os digo que el día del Juicio habrá menos rigor para la tierra de Sodoma que para ti».
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MI COMENTARIO
1. ¡Qué duras palabras, Señor! Yo soy Corozaín. Yo soy Betsaida. ¿Qué me ha sucedido? ¿Cómo he llegado hasta aquí? Este Evangelio no es para deprimirnos ni para angustiarnos por el infierno. Este Evangelio es tan solo un nuevo recordatorio del Señor de que no por el hecho de llamarnos cristianos vamos a llegar al Cielo. «Velad y orad». Mira que es fácil criticar este mundo y todos sus errores. Con frecuencia señalamos a Tiro y Sidón como ciudades paganas y pecadoras, y nos regocijamos farisaicamente de que nosotros formamos parte del pueblo elegido de Dios.
2. ¡Y somos el Pueblo elegido de Dios! Cuántas gracias hemos recibido en nuestra vida cristiana. Ya deberíamos ser santos. Nosotros somos Cafarnaúm. Pero Cafarnaúm no debe olvidar que para escalar el Cielo se debe trabajar mucho, convertirnos cada día, quitar las cosas feas que manchan nuestra alma. Especialmente, debemos trabajar la humildad para implorar perdón y ayuda de Dios. ¡Cuántas personas de otras culturas, religiones y estratos sociales no habrían sido grandes santos si hubiesen tenido la oportunidad de vivir nuestra vida y circunstancias! ¡Cuántos milagros no ha hecho Dios en nuestra vida y, sin embargo, seguimos viviendo con frialdad! ¡Cuidado, aún estamos a tiempo!
Pidamos al Señor la gracia de reconocer los milagros que ha realizado en nosotros para que salgamos afuera a predicarlos como auténticos apóstoles. Y le pedimos también la intercesión de san Camilo de Lelis para que ruegue a Dios la sanación de todos los enfermos, especialmente por los enfermos del coronavirus. Les mando a cada uno la bendición de Dios, P. Antonio Rivero, L.C.