Viernes, 14 de agosto
RESUMEN DEL EVANGELIO, VIERNES 14 DE AGOSTO
MEMORIA DE SAN MAXIMILIANO MARÍA KOLBE, apóstol de la Inmaculada, deportado durante la segunda guerra mundial al campo de concentración de Auschwitz por los nazis de Hitler. Allí se ofreció como voluntario en sustitución de un compañero condenado a morir de hambre. Murió este día en 1941, después de recibir la inyección letal. San Maximiliano, ruega por nosotros.
Evangelio 19, 3-12: En aquel tiempo, se acercaron a Jesús unos fariseos que, para ponerle a prueba, le dijeron: «¿Puede uno repudiar a su mujer por un motivo cualquiera?». Él respondió: «¿No habéis leído que el Creador, desde el comienzo, los hizo varón y hembra, y que dijo: Por eso dejará el hombre a su padre y a su madre y se unirá a su mujer, y los dos se harán una sola carne? De manera que ya no son dos, sino una sola carne. Pues bien, lo que Dios unió no lo separe el hombre».
Dícenle: «Pues ¿por qué Moisés prescribió dar acta de divorcio y repudiarla?». Díceles: «Moisés, teniendo en cuenta la dureza de vuestro corazón, os permitió repudiar a vuestras mujeres; pero al principio no fue así. Ahora bien, os digo que quien repudie a su mujer -no por fornicación- y se case con otra, comete adulterio».
Dícenle sus discípulos: «Si tal es la condición del hombre respecto de su mujer, no trae cuenta casarse». Pero Él les dijo: «No todos entienden este lenguaje, sino aquellos a quienes se les ha concedido. Porque hay eunucos que nacieron así del seno materno, y hay eunucos que se hicieron tales a sí mismos por el Reino de los Cielos. Quien pueda entender, que entienda».
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MI COMENTARIO: dignidad del matrimonio
1. Nunca más oportuno que hoy para reflexionar en el matrimonio. Sabemos que está bombardeado por todas partes, aplaudiendo el divorcio, el adulterio, la separación, el matrimonio del mismo género. ¿Hasta cuándo, Señor?
2. Dios, al crear el matrimonio natural con Adán y Eva, los hizo hombre y mujer con una misión concreta: crecer y multiplicarse. Crecer en el amor y multiplicarse en hijos. Este matrimonio natural a los ojos de Dios es una imagen de Dios Trinidad, por tanto, algo sagrado y sublime. “Lo que Dios ha unido, no lo separe el hombre”, fue el mandato de Dios. ¿Quién es el hombre para destruir el plan de Dios sobre esta institución divina y sagrada?
3. Y Cristo vino a elevar ese matrimonio natural a sacramento, es decir, en fuente de gracia divina de santificación y camino de realización humana y espiritual. Este sacramento del matrimonio ahora será la imagen del desposorio de Cristo con su Iglesia. ¡Sublime misterio, lo llama san Pablo en la carta a los Efesios capítulo 5!
Por tanto, en los planes de Dios no entraba el divorcio, ni la separación ni el matrimonio del mismo género. Es decir, esos ataques a esta institución sagrada y divina, que hoy están a la orden del día. Pidamos en este día, por intercesión de san Maximiliano María Kolbe, por todos los matrimonios, especialmente por aquellos que están pasando por momentos duros y difíciles. ¿Medios para superar las dificultades y crecer en la madurez? Oración, amor, comprensión, diálogo, respeto mutuo, perdón. No hay otra. Que la familia de Nazaret, José y María, intercedan por los matrimonios. Les pido una oración por los novicios que hoy harán sus votos religiosos aquí en el noviciado de Monterrey. Felicito a los papás de estos jóvenes que han sido fieles a la llamada de Dios a este “matrimonio espiritual o alianza” con Cristo. Les mando a cada uno de ustedes la bendición de Dios, P. Antonio Rivero, L.C.
